Buenas noches doctor... estoy indeciso por una cuestión que no me apetece recordar, el caso es que hoy me he despertado inquieto y nervioso, ha sido una de las pocas veces en mi vida que me obsesiono con una canción y no recuerdo el estribillo... creo que decía algo así: ¡Date una vuelta por ahí y luego ven y cuéntame lo que hay!
Tan obsesionado estaba que acaté las órdenes, solo salí de casa con el móvil y los auriculares, tras una vuelta de 5 minutos ya me agobiaban las personas, solo había hombres y mujeres por todas partes... a alguno de ellos le acompañaba algún otro animal. Yo, que estaba viviendo uno de esos días donde uno le pide uno a la tierra que le trague, no encontraba lugar para esconderme.
Más desesperado que cuando salí de casa busqué una canción que no encontré en ninguna plataforma digital, así que la subí yo al youtube... La canción es de Deif y se llama dolor y calle. No recuerdo que me llevó a subir esa canción, solo sabía que necesitaba escucharla y lo hice dedicándosela a todos los gamers enfermos. Seguí caminando hasta que llegué a la conclusión de que era yo el único que sobraba.
Tras unas horas matutinas, iba sin rumbo ni destino cuando me pareció ver la cara de J. R. R. y tuve que esconderme en el primer sitio que encontré... no podía relajarme y después de una hora observándole sin poder salir a fumar, se me acercó alguien un poco preocupado que me vio con cara de haber entrado allí despistado.
Era un brunch, no llevaba suficiente dinero para comer y no se podía estar sin consumir... Solo llevaba 3 € y no tenía previsto gastarlo allí. Independientemente, se me podía permitir estar con tan solo pedir un refresco y hasta que no se vaya el desgraciado de fuera no podré salir de aquí sin arriesgarme a que me pase algo. Añadió aquél hombre que la silla que estaba ocupando estaba reservada para clientes VIP, no podía revelarme lo que iba a ocurrir pero me permitieron estar donde las cámaras no me grabaran y no pudiera molestar... para mi asombro, tenían una zona reservada para fumadores. No se podía consumir THC pero no me preocupaba ya que fuera de casa "casi nunca" llevo nada.
Le prometo doctor que todo fue una coincidencia... yo no esperaba lo que iba a pasar, pero pasó, llegó un señor a sentarse donde estaba yo anteriormente y le pude ver la cara, no parecía mucha cosa pero no me fío de las apariencias y poco después llegó el otro invitado VIP... era un niño grande con ínfulas, demasiadas ínfulas para la edad que tiene y aunque no estuvieran allí mucho rato se monto una escandalera de muy señor mío. Pareció que habían filtrado que ellos estaban allí porque empezó a salir y a entrar gente de forma incontrolable, cada uno de ellos con su merecida fama y sus seguidores correspondientes. Yo tuve que pedir el segundo refresco... entre tanta muchedumbre no podía ver a aquél que me hizo entrar aquí pero no pensé mucho en ello, no me gusta ser aguafiestas y, por un momento, yo también me estaba divirtiendo, aunque más por las caras anónimas que por las familiares.
Todo acabó, para mi, demasiado pronto (duró un total de muchas horas)... volví a caminar entre el vacío que se creó en la nada de la calle y me metí en un callejón que parecía no tener salida pero me encontré con alguien que llevaba más tiempo allí que yo y me confeso que estábamos en el callejón de los milagros. En mitad de la nada me regaló una piedra para fumar alegando que él lo estaba dejando... pensé en Zenit porque a veces creo que él es Zipi y yo Zape, o viceversa, pero los dos sabemos que al final del túnel hasta las ratas son nuestras amigas. Pude fumarme la piedra tranquilo y calmar el mono antes de proseguir con mi destino. Me dio una guía sobre un lugar donde pudiera pasarlo bien... Confesó que no iba mucha gente y eso era lo que hacía de ese lugar tan especial. No reveló el nombre del sitio pero me dijo como encontrarlo.
Estuve acordándome de todos sus vivos cuando me llevó a la calle esperanza... era infinita y estaba desierta, hasta llegué a preguntarme a mi mismo ¿que habrá aquí de divertido para mí? mi casa quedó lejos hace rato y no sé como regresar.
Cuando llegué a un punto en el que solo quería volver a mi lugar de siempre, tomarme las pastillas para dormir y las de dejar de no soñar, me di en la cabeza con la sombra de un lugar muy discreto, "Los sueños realidad", y creo que es el que me indicó el otro muchacho... deje de acordarme de sus vivos para sonreírle y entrar con decisión para brindar a su salud. No fue un error venir aquí, cualquiera de mis colegas fliparía con el cartel que dice: "¡Bebidas gratis, barra libre y autoservicio!" La única pega es que no había nada, ni gente, ni música, ni nadie que atendiera. Al entrar solo pude ver a una muchacha que bailaba al ritmo del silencio y llamó mi atención.
El cartel que hace que yo mismo me ponga la primera ronda también me hace desconfiar, pero voy a intentar hacer caso al mundo y disfrutar de esta oportunidad. No pretendo molestar pero de vez en cuando miro a la única persona que está en este lugar, agacho la cabeza para disimular cuando ve que me fijo en ella y me devuelve la mirada... no agacho la cabeza por nada especial, lo hago para que mientras me mire parezca que me fijo en sus pies, sus zapatos o sus pasos... y de paso, me evito ver si pone malas caras. De la chavala solo pude percibir que era una niña y que la confundí con una guiri cuando vi en su frente una frase que en inglés decía: My name is no!... Me sentó bien que esas fueran las primeras impresiones porque ayer casi meto la pata con Isabel y no quisiera repetirlo.
Bebo tranquilo y aquí no hace falta salir para fumar y pensar... entre cigarro y cigarro observo que la niña que está dentro está más viva que yo y sabe moverse, así que no me pude fijar en otra cosa. Recuerde doctor que no había música y aún así ella bailaba. Yo me divertía solo viendo como ella se divertía, era todo tan perfecto que no quería que se acabara el día, pero la noche esta vez se adelantó dejando deseos incumplidos y que eso ocurra en la calle esperanza me parece una estafa. Yo empecé a verla doble hace ya un buen rato, me tomé muy a pecho las palabras del cartel que hay al entrar... Me puse a imitar a la chica, bailé con mi sombra al ritmo de mi corazón y durante un buen rato me olvidé de todo lo que me rodeaba.
Cuando volvieron mis sentidos y observé de nuevo a aquella niña, para mi sorpresa había cambiado... se la veía alguna cana y también alguna arruga. Un pájaro me confesó que en este tiempo donde me comporté como ella, había crecido y llorado... por un momento la confundí con la vida hecha carne y, como la vida que es, me entraron ganas de darla el pésame por eso de que todos los días pierde a personas queridas. Pero todo era maravilloso y no quería que borrara su sonrisa ahora que me la empezaba a mostrar. Parece mayor de edad, soltera y con ganas de marcha... yo que me conozco sé que soy mayor de edad, soltero y tengo ganas de marcha. A ratos me hace creer que está ahí para mí y otras que yo soy el que está para ella.
Intento hacer lo mismo que al principio y mirarla los pies cuando me devuelve la mirada, pero esta vez cuando lo hago los mueve como queriendo que los siga, no me gustaría dejarme llevar por todo el veneno que llevo dentro, pero de algún modo he de expulsarlo. La frase de su frente la acortó hasta dejar solamente el "NO" y creo que lo había puesto en mi idioma porque pensé que empezaba a entenderlo... aún así, se acerca suave pero de manera firme y me hace el amor por los ojos. Me la pone dura ver como domina el rap, la bachata y el trap entre otros muchos estilos más. Ella dice que es talento pero la culpa de que se revolucionen mis hormonas la tienen su vestimenta ordinaria y esos movimientos seductores que claramente hacía para provocar... no había nadie más y yo estaba encantado. Aunque por sus pasos parecía que bailaba un vals ella me confesó que buscaba bailar un regeaton muy lento y tan cerquita como los bailarines de Sergio Dalma, totalmente pegados. Entre roces y gotas de sudor me levanta algo más que la moral y en su oído se me escapó un pequeño jadeo de placer a la que ella respondió llevándose mis brazos por encima de su cuerpo... Y entre que pasa todo esto o soy yo quien se lo inventa, mi imaginación se dispara con otra copa. Me pregunto si será capaz de dominar el flamenco, la rumba o la copla.
Su único propósito es llevarme hasta el cielo... lo consigue de forma sobrada diciendo que quiere ser mi luna y también que quiere que yo sea aquel que besa a todas sus fans. Quisiera hacerla una señal, pero no encuentro maneras, esta noche es cierto que ha conseguido ser mi luna... Y yo pretendo ser la estrella que más brille en su cielo para que jamás se sienta sola. Todo un océano de distancia no significa nada. Me lleva al clímax y reviven ciertas emociones, pero no se detiene y me pide que la lleve en la maleta mientras que con una sonrisa me avisa de que solo podrá quedarse durante tres bailes más. Al preguntarla si la volveré a ver, me dio un beso en la frente y terminó diciendo que este día nadie lo olvidará...
...Yo, que todas las que bailaron conmigo fueron testigos de que solo me acercaba a donde mi virginidad no corriera peligro, puedo afirmar que los tres bailes duraron mucho más de lo esperado y no hace falta contar lo que pasó en ese tiempo porque nosotros seguimos a nuestro rollo... aunque puedo destacar que entre el calor y las calores pudimos mantener alguna conversación interesante.
En el claro momento que sobraba toda la ropa la chica se desvaneció entre mis brazos, se acabó la bebida y me volví a encontrar... resulta que me desperté del sueño y esa a la que en todo momento confundí con la vida, me había engañado. Nunca estuvo conmigo y todo fue una trampa de mi mente enferma, aún así fue tan bonito que toca aprender de nuevo lo que es real y lo que no. Mientras eso ocurría, me comportaba como cualquier semental cuando lo apartan de las hembras. Como la incertidumbre crecía en cada momento fui a por mi maleta y, al abrirla, me encontré con un disco suyo dedicado y firmado. Entonces comprendí algo que dije sonriendo y no muy alto para que nadie me escuchara. ¡Qué puta es la vida cuando quiere! ... ¡tan puta es algunos ratos que esta noche saldré de fiesta a ver si es verdad eso de que quiere repetir! ... Porque debe saber que la luna me tiene a sus pies para lo que quiera, y ella a veces también.